¿Qué te ha dado ahora para querer opositar para Policía Nacional?
Esa es la pregunta común que se hacen las madres, las novias, los novios, amigos …, de quienes en un momento dado deciden prepararse la Oposición de Policía Nacional. “Pero si es muy peligroso…”, “pero, si no pagan mucho..”, “pero, si te van a mandar a…”, y un largo etcétera de tópicos recurrentes.
La respuesta inmediata es muy simple: en cada Policía Nacional hay una soterrada vocación de servicio, de ayudar en catástrofes o a aquel que ha sufrido, bien por un desastre, un delito del que es víctima, pero siempre, un trasfondo de auxilio al ciudadano. Un buen Policía, que lo es por ese instinto de vocación, siempre estará cómodo y disfrutará de cualquiera de los servicios que tenga que prestar. Y el día que ayude a una persona, se sentirá especialmente feliz al llegar a su casa. Aunque hay que reconocer que, en esta profesión, las caras ocultas de algunos delincuentes tienen su parte negativa.
Seguridad y variedad profesional
No sólo hay un componente de vocación. Otro argumento de los 3 fundamentales es la garantía y seguridad en la profesión. La Policía Nacional cuenta con un historial de seguridad laboral impecable. No sólo por la continua revisión de la seguridad en el trabajo, por los comités de riesgos laborales, sino también por su carácter de funcionario de carrera. Los Policías Nacionales lo son desde el momento en que se incorporan a su primer destino, y esa seguridad y estabilidad laboral, es un atractivo más.
Y ¿cuál es el tercer argumento? Posiblemente la variedad enorme de posibilidades dentro de la profesión. En la Policía Nacional existe un despliegue por todo el territorio español y sus embajadas exteriores, así como en la cooperación internacional. Los posibles trabajos a realizar son incontables. Un Policía Nacional puede ser GEO, prestar servicio en la embajada de París, radio patrulla, investigador, experto en comunicaciones, informático, escolta, trabajar con perros o caballos, TEDAX…., no se podrían poner todas las unidades o especialidades que existen.
Vías de acceso al Cuerpo
Para pertenecer a la Policía Nacional hay 2 vías de acceso. Una a la escala básica, que es la que realiza de manera directa las tareas propias del policía, y otra el acceso a la escala ejecutiva, que es la encargada de la dirección y mando de los trabajos encomendados a las categorías inferiores. Esta última categoría exige titulación Universitaria.
El acceso a la escala básica, categoría de Policía, se realiza mediante el proceso de oposición. 5 obstáculos hay que salvar: un examen físico, una prueba psicotécnica, una prueba de ortografía, una de conocimientos (sobre un total de 40 temas) y finalmente una entrevista que evalúa de manera directa las capacidades y el perfil del opositor.
La mejor preparación
Aprobar esta oposición exige ser el mejor en los 5 obstáculos, porque uno de ellos nos eliminará de la carrera. La preparación es simple: trabajo diario y duro en todos los frentes. Una formación orientada por un preparador o preparadores que dominen las materias de psicotécnicos, ortografía y temario. Un trabajo, muy especializado, en la preparación concreta de las pruebas física, y finalmente un perfecto asesoramiento sobre las entrevistas profesionales. Si encuentras todo eso, la oposición será un éxito, Si falta algo en tu preparación, lo que pasará es que invertirás más tiempo del necesario, más recursos y darás más vueltas para obtener un fin.
Si necesitas más información sobre estas oposiciones o quieres prepararlas con nosotros no dudes en contactar con nosotros a través del teléfono 983 21 12 58 o del correo electrónico info@veropo.com. También estamos a tu disposición en la calle Juan Agapito y Revilla, 6-8, 47004 Valladolid, y a través de nuestro formulario web.